Hoy una novela gráfica de
esas que hacen que se te remueva algo por dentro: Castillo de arena.
Castillo de arena es una
novela gráfica del magnífico dibujante suizo Frederik Peeters.
En ella un grupo de
personas se ve atrapada en una playa cualquiera de la cual no pueden escapar y
que tiene una particularidad especial, y es que el tiempo en esta playa pasa mucho
más rápido de lo habitual; de hecho en un solo día transcurre una vida entera.
Así pues los personajes
ven como en cuestión de pocas horas los mayores se convierten poco a poco en
ancianos, los niños pequeños se vuelven adolescentes y empiezan a sentir
curiosidades por distintos elementos de la vida, etc.
En definitiva un
excelente reflejo de lo que acaba siendo la esencia de la vida, lo que
realmente importa, que no es otra cosa que las relaciones humanas y el poder de
los sentimientos, y que se ve perfectamente reflejado en las pocas líneas que
dibujan los rostros de los protagonistas (algo en lo que Peeters es un
auténtico maestro).
Una obra muy recomendable
y que quizás nos haga replantearnos qué merece realmente la pena en la vida.
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