Arrow (ESP)

¿Qué obtenemos de sumar Batman + LOST +  Gossip Girl? Pues la serie que recomendamos hoy: Arrow.

Arrow es seguramente la serie más entretenida y más en forma de todas las que se han estrenado este año.

El argumento de la serie es seguir las vivencias de Oliver Queen, un niñato pijo que no ha tenido que dar un palo al agua y que nunca se ha preocupado por nadie que no sea él mismo y que un buen día naufraga en una isla aparentemente desierta en la que se estará durante cinco años.

Tras esta estancia en el “paraíso” Oliver vuelve a la civilización pero ya no es la misma persona. En el naufragio su padre le explicó el secreto de Starling City, la ciudad en la que viven y que se pudre por culpa de toda la corrupción existente, de la cual los Queen son parte implicada. Antes de morir su padre le hace prometer que liberará la ciudad de todos los corruptos.

Gracias a los cinco años en la isla, donde las pasará canutas para sobrevivir y se verá involucrado en diversas luchas entre unos misteriosos personajes, Oliver se convierte en una máquina de matar, cosa que le irá perfecta para, a su regreso al hogar, convertirse en un superhéroe que purgará la ciudad: El encapuchado (el Flecha Verde de DC que aparece en Smallville).

Para más inri, el protagonista deberá retomar las relaciones con las personas que estaban en su vida antes del accidente (léase madre, hermana, amigos, exs, …) y llevar una doble vida como millonario y superhéroe perseguido (os suena?). Y digo lo de perseguido, porque evidentemente se pasa la ley por el forro y tiene a la policía, encabezada por el padre de su ex, siguiendo sus pasos.

No falta además un némesis (tanto en la isla como en la ciudad) que hará dudar a nuestro héroe de sus posibilidades, ni compañeros que le ayudarán, además de todas las triquiñuelas que van desarrollando otros personajes buscando lo mejor para sus propios intereses.

Normalmente los capítulos son autoconclusivos pero con una trama principal a lo largo de la temporada, y en cada uno nos van enseñando flashbacks de las vivencias de Oliver en la isla, lo que nos va dibujando capítulo a capítulo el carácter y motivación del protagonista.

En definitiva Arrow es una serie llena de acción, con unos personajes principales bien trabajados (cada vez más “profundos”) y unos secundarios con carisma que dan la talla (algunos más que otros evidentemente), que no os arrepentiréis de ver, todo lo contrario.